Este matiz tomó forma de vestido, añadiéndole un efecto piel y una línea retro y conjuntando su esplendor con toques de charol borgoña en los zapatos y un gorro estilo ruso:
♥VESTIDO CAMELIA♥
¿Por qué convertir el granate en uno de tus fetiches?
¡Muy sencillo!
Porque es un color elegante y con fuerza. Puedes aprovecharte de ese poder combinándolo con tonos similares (borgoña...) y rematar esos atributos con dorados y negros:
Estas piezas de Julieta Álvarez son una elección perfecta.
También puedes rebajar la potencia de este color con gamas cálidas, como los ocres e, incluso frías, como los tonos verdes. Esto hará que tu imagen sea más cercana y cálida.
El marrón será tu aliado fiel en cualquier caso.
¡Añádele un rosa chicle si eres de las atrevidas!
Pero sobre todo, ¡diviértete descubriendo conjuntos diferentes y haz de un vestido, mil y uno!
¡Mezcla y remezcla!
